15 de marzo de 2010

Mike

  

Por los azares no tan azarosos de la red hicimos contacto, tú desde la ciudad mas grande del vicio, le bullicio y la desesperanza en que se ha convertido Juárez.
   Nuestra distancia poco significativa pero insalvable asi como las primeras propuestas de tu parte limitaron la posibilidad de conocernos.
    Cuantas veces hablamos por teléfono al principio? quizá solamte dos, y de ahí en adelante una luz encendia en el monitor y muchas palabras viajando en el ciber espacio para decirnos confiadamente nuestras debilidades y nuestras fortalezas, nuestros aciertos y los mayores desaciertos, errores y sufrimientos.
   Que nos une? quizá el origen común y el sentir por alguien que nos tiene en la distancia, en los silencios, en los tal vez.
     Cuantas reflexiones a veces muy duras hemos compartido, pero al final siempre sonreimos y repetimos los rituales del beso y del pingüino.
     Como llegamos a este punto de entendimiento y simpatía no lo sé, pero se ha transformado en una amistad y omprensión tan bella que no quisiera perderla.
    Gracias Mike por secar mis lágrimas reales de manera virtual.
    Gracias por leer mis ilusiones y mis desesperanzas, por reir de mis bromas y mis despistes y  sentirte apachurrado por mis tristezas.
    Gracias por la confianza que me tienes y por lo bien qe asimilas mis palabras.
Gracias por ser lo que eres, un amigo a la distancia espacial y temporal pero un amigo al fin.
Te aprecio de verdad.
Gracias por la rosa qe me enviaste al celular, dndome animos y diciendome que es de corazón.
Te pedí un abrazo un apapacho y sé que era imposible me lo dieras...pero hallaste, con esa imagen, y tu mensaje  la manera de hacerte presente y ofrecerme tu cariño.

    Casi he llorado hoy   y tu sabes por que y por quién.
de quetzalli la estrella del  amanecer

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