8 de febrero de 2010

Risa o Llanto?


Mueca sonrisa de la calle citadina, rostro ingenuo y duro pretendiendo dar una distracción, la falsa lágrima de tu rostro sonriente se vuelve verdad ante la mayor contradicción que es tu mirada dolida y cansada, incierta y la mueca de tu boca real que por mas que lo intentas no logras hacer coincidir.

Tus manos es juego de habilidades, pelotas de colores al aire pretenden ser las tímidas naranjas abolladas que tal vez mas tarde tengan por función saciar tu sed e incluso tu hambre.
Decidiste por ti mismo salir a esquivar autos y lidiar con el tedio de los citadinos que apresurados y de mal humor se dirigen a sus casas o trabajos? O no tuviste otra opción?
Compites día a día y no precisamente en la bolsa y ni siquiera en el área laboral por un ascenso o un mejor salario, sino en el piso gris y asoleado del subempleo, compites con otros marginados como tú encarnizadamente por las monedas que están en el tablero de ese auto de lujo, o en la bolsa de alguien que se conmueve de ti, o acaso un niño que se siente triste y a la vez contento de mirarte sucio y sudoroso lanzar una y otra vez las “pelotas” al aire para atraparlas, como quisieras atrapar una oportunidad de empleo digno , de vivienda, de educación.
A veces me pregunto seriamente si los colores de tu rostro son para divertir o mas bien para ocultar la vergüenza de al final ser un pedigüeño.
Una niña pide la versión tarahumara de la limosna, un voceador ofrece las noticias cargadas de morbo, un hábil limpiaparabrisas no permite que se vea tu espectáculo y tu sigues sonriendo y caminando graciosamente, todos esperan el favor, la simpatía de los conductores que además no solo no los miran sino los temen y no se atreven a bajar las ventanillas no sea una trampa para ser robados.
Cuantas horas pasas ahí, yo te veo una mañana si y otra también, a veces a mediodía aun no termina tu jornada….
Y hay quienes dicen que ganas mas que un profesionista..me pregunto porque no cambiar el escritorio o cualquier labor profesional por las horas en un crucero gris, multicolor, a la interperie, frio calor, lluvia, nieve, insultos, peligros, vergüenza…si en verdad como parece es tan lucrativo…
Ha cambiado el semáforo..me alejo pensando en la llamada sociedad del peligro, en los otros miles de mexicanos que como tú no tienen mucho de donde escoger.
El semáforo en verde y todos corremos, te quedas atrás en ese punto del abandono social, intrépido, sonriente y lloroso, falso y creativo con el objetivo de ganar el pan, la forma de vivir un día más.

de Quetzalli la estrella del amanecer

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